Tras volver a casarse, este hombre maduro tiene una nueva hijastra morena, jovencita y muy mona, pero muy viciosa en el sexo. De hecho, cuando su mujer salió a hacer la compra y se quedaron a solas, la chavala acudió al salón donde leía tranquilamente el periódico y, sin pedirle permiso, comenzó a chuparle la polla. El hombre se dejó llevar y finalmente, se folló a su hijastra sin piedad.