Puede que no tenga la mejor figura, pero al menos la novia gordita de este chico si que tiene siempre unas ganas de sexo terribles. De hecho hay veces en las que le pide que acompañe sus polvetes con una cámara, para tener un bonito recuerdo e incluso compartirlo en las redes. Una vez más la chica se come su rabo con ganas y disfruta a cuatro patas de sus pollazos, mientras él deja grabando la cámara cerca de la cama.